Descripción

La moneda de 20 céntimos de euro de Bélgica de 2002 es una pieza de la serie estándar del euro utilizada en todos los países miembros de la Eurozona. Esta moneda específica tiene características tanto de diseño como de fabricación que reflejan la identidad belga y su pertenencia a la Unión Europea.

Características Técnicas Moneda 20 céntimos 2002 Belgica

La moneda de 20 céntimos de Bélgica tiene un diámetro de 22,25 mm, un grosor de 2,14 mm y un peso de 5,74 gramos. Está hecha de «oro nórdico», una aleación compuesta por 89% de cobre, 5% de aluminio, 5% de zinc y 1% de estaño. Esta aleación no solo le da su color dorado distintivo, sino que también le proporciona durabilidad y resistencia a la corrosión.

Diseño

El anverso de la moneda de 20 céntimos de 2002 presenta el retrato del rey Alberto II de Bélgica, quien reinó desde 1993 hasta su abdicación en 2013. Este diseño, obra del artista belga Jan Alfons Keustermans, muestra el perfil derecho del monarca, acompañado de su monograma real, una «A» estilizada debajo de una corona. A la izquierda del retrato se encuentra el año de acuñación «2011», mientras que las doce estrellas de la Unión Europea rodean el borde exterior de la moneda, simbolizando la unidad y la identidad de los estados miembros.
El reverso de la moneda es común a todas las monedas de 20 céntimos de la Eurozona. Diseñado por el artista belga Luc Luycx, este lado muestra un mapa de Europa con los quince países de la Unión Europea resaltados. Las doce estrellas de la bandera europea rodean el mapa, representando los ideales de unidad, solidaridad y armonía entre los pueblos de Europa.

Contexto y Significado

La emisión de la moneda de 20 céntimos de Bélgica en 2002 es una manifestación de la continuidad y estabilidad del país en el contexto de la Eurozona. Durante el reinado de Alberto II, Bélgica experimentó importantes cambios políticos y sociales, y la adopción del euro fue un hito significativo en la integración europea.

Desde una perspectiva numismática, esta moneda es una pieza relevante tanto por su diseño artístico como por su contexto histórico. Los coleccionistas valoran estas monedas no solo por su valor intrínseco, sino también por su simbolismo y el papel que juegan en la narración de la historia contemporánea de Europa.

En resumen, la moneda de 20 céntimos de Bélgica de 2002 es una representación del legado monárquico belga y de su integración en la comunidad europea, fusionando elementos de la identidad nacional con los ideales de la Unión Europea.